viernes, 7 de agosto de 2009

Sincronización horaria

En sistemas informáticos, es bien sabido que es fundamental disponer de sincronización horaria entre todos los dispositivos interconectados en la red. Ya que generalmente los procesos de comunicaciones requieren para su funcionamiento que el intercambio de mensajes entre dispositivos se realice ordenado en el tiempo, es habitual poner en práctica aquella sentencia: "Sincronicemos nuestros relojes", antes de realizar la operación.




La importancia de la sincronización abarca todos los niveles tecnológicos: desde los famosos "gigaherzios" de velocidad del procesador de nuestro ordenador (que es la frecuencia de funcionamiento de su reloj interno quien marca "el pulso" en la ejecución de instrucciones); a los sistemas de satélites artificiales del GPS para establecer su posición.

Pero al lío, no me había planteado su relevancia más allá del funcionamiento operacional de nuestros sistemas hasta que hace unos días me comentaba un compañero el haber recepcionado varias hojas de reclamaciones por parte de administrados referidas siempre al siguiente caso:

Como en todo servicio al público, la ventanilla tiene un horario pasado el cual, ya no se atiende, aunque el organismo permanezca abierto hasta más tarde. Debe ser así, ya que el tiempo restante se utiliza para gestionar, tramitar y procesar lo recepcionado hasta ese momento, si se siguiera admitiendo más documentación, por acumulación, no se podría tramitar eficazmente. Por ello, el sistema informático deshabilita automáticamente la emisión de tickets de turno (del tipo de los de la pescadería) a la hora de cierre para evitar que sigan entrando usuarios. Durante el verano, por la jornada reducida, este cierre es a las 13:30.

El caso es que el otro día mientras se le explicaba amablemente este detalle a un señor que solicitaba ser atendido pasados 7 minutos de la hora de cierre y no había podido sacar su ticket de turno, alegaba, no sin razón y señalando a un panel informativo auxiliar, que la "hora de la Junta" marcaba aún las 13:29 y exigía ser atendido.


Y tenía razón, aquél panel electrónico, al que nunca dábamos importancia pues se limita a emitir rotativamente mensajes informativos y aclaratorios para la gente mientras esperan ser atendidos, en un momento concreto visualiza también la hora. Y mira por dónde, no estaba sincronizado con el resto del sistema acumulando un retraso de casi 10 minutos.

Me hizo gracia que lo denominara "La hora de la Junta", elevando inusitadamente la relevancia de aquel panel a un ente supraorganizativo. Al tiempo recalificar, para mi responsabilidad, el asunto de resolver esa "desincronización" como de caracter "crítico".

Se trata de dispositivos autónomos de M&P Electronics, interconectados por un bus RS485 a un concentrador, a su vez vía RS232 a un PC. Finalmente, será necesario desarrollar un software específico ejecutado en el PC como un servicio de Windows, que envíe los códigos necesarios al panel informativo para actualizar su hora, con cierta frecuencia.

Tareita pendiente...